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“Son figurantes…”. Una de las participantes de ‘Pesadilla en la cocina’ confiesa años después toda la verdad sobre el concurso

El programa de Chicote que ahora triunfa en Netflix.

¿Qué ocurre realmente en ‘Pesadilla en la cocina’, el programa en el que el chef Alberto Chicote visita restaurantes al borde del desastre y trata de ayudarlos a mejorar? Esta es la pregunta que muchos espectadores se hacen al ver los capítulos que recientemente han llegado a Netflix, la plataforma de streaming más popular del mundo.

Una de las personas que puede responder a esta cuestión es Helena, una de las socias de Don Super Pollo, un local que fue intervenido por Chicote en una de las entregas del programa. Helena, que también es conocida en TikTok como ‘@mami.de_tres’, ha aprovechado su fama en esta red social para contar algunos secretos sobre el rodaje del show.

La realidad detrás de las cámaras.

Según ha explicado Helena, el programa tiene un guión previo que marca los tiempos y las escenas que se van a grabar, pero no lo que se va a decir o hacer. “Nadie dice lo que tenemos que hablar. Ellos no ponen cosas ahí, no te meten una rata muerta ni te ponen suciedad. Esas cosas existen”, ha afirmado.

@mami.de_tres #greenscreen primera parte del resumen de nuestra intervención en el programa de pesadilla en la cocina ! He respondido a las preguntas que mas me habeis hecho , si teneis mas : comentar ! #pesadillaenlacocina #albertochicote #netflix #donsuperpollo #chicote #realitytv #realityshow #programastv #donpollo ♬ sonido original – Mami de tres 🌈 helena 🌈

Tampoco hay actores entre los clientes que acuden al restaurante a probar los platos. “Son figurantes. Ponen un anuncio: ‘Oye, ¿queréis comer gratis?’. Y en España gratis y comer…”, ha revelado. Lo que sí ha dejado claro es que Chicote no tiene mucha relación con los dueños o empleados del restaurante fuera de las cámaras. “Cuando decían corten, él se iba. No te puedo decir si es majo o no”, ha confesado.

Helena también ha contado cómo se prepara el set de grabación dentro del local. “Trajeron unos biombos. Ellos llegan el domingo, les damos las llaves y montan en una esquina del restaurante con biombos, sillas, con pantallas donde están los de sonido, los guionistas, los productores, la directora y Alberto, que está ahí con su maquillador”, ha detallado.