‘First Dates’ nunca deja de sorprender.
¿Te imaginas ir a cenar con un desconocido y que sea el amor de tu vida? ¿O que sea un auténtico desastre y no quieras volver a verlo ni en pintura? Eso es lo que les pasa a los protagonistas de ‘First Dates’, el programa de citas más exitoso de la tele, que lleva cinco años emitiéndose en Cuatro y que nos ha regalado momentos inolvidables.
Conducido por el simpático Carlos Sobera, que hace de anfitrión y de cupido, el programa nos muestra cómo son las primeras impresiones, las chispas, los nervios y las decepciones de miles de personas que se atreven a buscar el amor en el restaurante más famoso de España. Pero ‘First Dates’ no solo es entretenimiento. Es también una ventana a la realidad social de nuestro país, donde conviven personas de todo tipo y condición.
En el programa hemos visto a jóvenes y mayores, a heteros y gays, a blancos y negros, a cristianos y musulmanes, a discapacitados y no discapacitados… Todos ellos con un denominador común: el deseo de encontrar a alguien especial con quien compartir su vida. Y hemos aprendido que el amor no tiene fronteras ni barreras, y que cada uno lo vive y lo expresa a su manera. Hemos celebrado los flechazos que han surgido entre algunos comensales, y hemos lamentado los fracasos de otros.
Una joven acude a ‘First Dates’ con pareja… pero había una explicación.
¿Te imaginas ir a una cita a ciegas y descubrir que tu acompañante ya tiene pareja? Pues eso es lo que le pasó a David, un mexicano que se presentó en ‘First Dates’ dispuesto a encontrar el amor. Lo que no sabía es que su cita, Estefanía, también era mexicana, activista y poliamorosa. Sí, has leído bien: poliamorosa. Estefanía tiene una relación abierta con otra persona y busca experimentar cosas nuevas con otras personas. ¿Cómo se lo tomó David? ¿Y Carlos Sobera? Te lo contamos todo.
Estefanía llegó al restaurante de Cuatro con una sonrisa y muchas ganas de conocer a alguien especial. Nada más entrar, se presentó como una chica camaleónica, que le gusta todo tipo de música, arte y cultura. También reveló que es de Ciudad de Juárez, una de las ciudades más violentas de México por culpa de la guerra del narcotráfico. Estefanía contó que había visto cosas terribles en su ciudad, como cadáveres colgados de los puentes con mensajes de los narcos. Por eso, decidió escapar de ese infierno y venir a España, donde se dedica al activismo social. Estefanía lucha por los derechos de las mujeres latinas que sufren violencia machista y por la diversidad sexual.
La reacción de Carlos Sobera no tiene desperdicio.
Hasta ahí, todo normal. Pero la sorpresa llegó cuando Estefanía le dijo a Carlos Sobera que tenía pareja. El presentador se quedó boquiabierto y le preguntó si era poliamorosa. Estefanía le explicó que sí, que tiene una relación abierta con otra persona y que no cree en la monogamia. Según ella, la monogamia limita las posibilidades de experimentar y disfrutar de la vida. Estefanía aseguró que su pareja estaba al tanto de que iba a ‘First Dates’ y que le había dado su consentimiento. Eso sí, le prometió a Sobera que sería sincera con su cita y le contaría toda la verdad.
Y así fue. Estefanía conoció a David, un mexicano que también hace activismo y que tiene mucho en común con ella. Los dos se cayeron muy bien desde el principio y tuvieron una conversación muy fluida. Estefanía no tardó en confesarle a David que era poliamorosa y que tenía pareja. David se mostró muy comprensivo y respetuoso con la situación de Estefanía.
Le dijo que no le importaba que tuviese otra relación y que le parecía interesante su forma de ver el amor. Estefanía se sintió muy aliviada y agradecida por la reacción de David. Los dos se dieron cuenta de que tenían mucha química y que podían compartir muchas experiencias juntos.
Cuando llegó el momento de la decisión final, los dos se dijeron que sí. Estefanía y David decidieron seguir viéndose y explorar su conexión. Los dos se fueron del restaurante de la mano y con una sonrisa. Carlos Sobera se quedó impresionado por la historia de esta pareja tan peculiar y les deseó mucha suerte. ¿Será el inicio de un gran amor o solo una aventura más? Solo el tiempo lo dirá.