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Jordi Cruz es cancelado de ‘MasterChef 12’: el chef reacciona a la decisión de RTVE

Polémica en La 1.

En el corazón de la programación de la televisión estatal española, ‘MasterChef’ se erige como un coloso del entretenimiento, un titán culinario que ha sabido ganarse el favor y la lealtad de un público diverso y exigente a lo largo y ancho del país. Sin embargo, este gigante de la gastronomía televisiva se tambalea ante la posibilidad de un abrupto final, tras verse envuelto en una controversia que ha sacudido sus cimientos en la más reciente de sus entregas.

El programa, que ha disfrutado de una audiencia envidiable, rivalizando incluso con el icónico ‘Pasapalabra’, se ha visto sumergido en un mar de críticas que no han cesado de arreciar desde el amanecer hasta el ocaso del día. El epicentro de esta tormenta mediática ha sido la actitud que el jurado adoptó frente a la inesperada renuncia de Tamara, una de las concursantes más prometedoras.

La polémica escena que ha dado mucho de qué hablar.

La escena que desató la polémica tuvo lugar en vivo, durante la última transmisión, cuando Tamara, enfrentada a un momento de presión insostenible, optó por una retirada digna y valiente, priorizando su salud mental sobre la competencia. Esta decisión, lejos de pasar inadvertida, dejó atónitos a los millones de seguidores del programa y provocó una reacción controvertida por parte del jurado, en particular del reconocido chef Jordi Cruz.

El enfoque de Cruz para manejar la situación ha sido señalado como el catalizador de un clamor popular que pide la cancelación del programa. La aparente falta de empatía hacia Tamara y los comentarios severos han encendido la indignación de una nación aún sensible por el recuerdo de lo acontecido con Verónica Forqué en ‘MasterChef Celebrity’.

La postura de Jordi Cruz, quien llegó a solicitar el delantal a Tamara y le indicó la salida de manera despectiva, ha sido ampliamente criticada. En un momento en que la sociedad muestra una creciente conciencia sobre la importancia de la salud mental, muchos han considerado su comportamiento como completamente inapropiado.

Este incidente ha surgido en un momento particularmente delicado para la industria del entretenimiento, en el que se intensifica la vigilancia sobre la conducta de jurados e instructores en programas de competencia televisados. ‘MasterChef’, en particular, ha estado bajo un escrutinio minucioso, especialmente a raíz del caso de Verónica Forqué, quien, al igual que Tamara, optó por abandonar el programa en una edición anterior, citando razones de salud mental.

La drástica decisión de RTVE.

Tras varios días de deliberación, Radio Televisión Española tomó una decisión irrevocable y procedió a retirar el controvertido episodio de su plataforma digital, emitiendo un comunicado: “La Corporación ha eliminado de RTVE Play y de sus redes el último programa de Masterchef. Lamentamos la emisión de un contenido que no debío suceder. La dirección ha reforzado los controles internos para evitar episodios similares. RTVE reitera su compromiso con la salud mental”.

En un giro inesperado, Jordi Cruz y Tamara sorprendieron a sus seguidores al conectarse en un directo el pasado domingo, en un intento por apaciguar las aguas turbulentas mientras preparaban juntos una carrot cake 2.0. “Yo me pongo muy intenso en ‘Masterchef’ y suelo decir cosas con carácter a personas que tienen carácter. Tamara es una persona con mente fuerte”, declaró Jordi Cruz. “Esta semana he escuchado comentarios que me han sorprendido y con una alegría pasmosa, algunos sin haber visto el programa”.

Además, Cruz enfatizó que “en ‘Masterchef’ estamos haciendo tele. Esto es un directo y ‘masterchef’ es tele. Cuando no estamos grabando creo que nos lo pasamos bastante bien. Es cierto que en ‘Masterchef’ yo me pongo más serio y, habré metido la pata en muchas ocasiones, pero estamos haciendo tele”.

Sin embargo, lejos de ser aceptadas, las explicaciones de Jordi y Tamara han sido interpretadas por muchos como un intento de limpiar la imagen del programa tras el incidente. La comunidad sigue dividida, y el futuro de ‘MasterChef’ pende de un hilo, mientras la conversación nacional sobre la salud mental y la responsabilidad mediática continúa evolucionando.