Polémica tras la entrevista de Telecinco.
En las profundidades del mundo del espectáculo, donde las luces de la fama a menudo iluminan rincones oscuros de la vida personal, Bárbara Rey se encuentra en medio de una tormenta mediática que ha sacudido los cimientos de su existencia. La exuberante vedette, que una vez cautivó al público con su carisma y talento, enfrenta ahora un desafío que trasciende el escenario: la transformación de su hijo Ángel Cristo en una figura pública, un proceso que ha desencadenado una serie de eventos desafortunados y conflictos familiares que han capturado la atención de toda España.
Ángel, quien en tiempos pasados se caracterizaba por su discreción, ha emergido de las sombras para reclamar su lugar bajo el foco de la atención pública, un movimiento que ha tenido repercusiones inesperadas en la vida de su madre. Bárbara, conocida por su fortaleza y resiliencia, se ve ahora en la mira de su propio hijo, quien parece haberla elegido como blanco de críticas y comentarios que no dan señales de cesar.
“Nunca he sentido tanta vergüenza”.
La situación se ha intensificado con la participación de Ángel en el reality de supervivencia ‘Supervivientes 2024’, un desafío que ha puesto a prueba no solo su capacidad de resistencia sino también la estabilidad emocional de su madre. Pipi Estrada, periodista deportivo y figura conocida en el circuito de la prensa rosa, ha revelado detalles íntimos de conversaciones nocturnas con Bárbara, en las que la actriz expresa su descontento y preocupación por la relación de su hijo con su pareja, Ana Herminia.
Estrada, armado con información explosiva obtenida de estas charlas privadas, ha llegado al programa ‘Fiesta’ con la intención de desentrañar la compleja dinámica familiar que se esconde tras las cámaras. Según sus palabras, Bárbara se siente agobiada y exhausta por el continuo drama que rodea a su primogénito y su compañera sentimental, la venezolana Ana Herminia.
La actriz, que ha compartido su dolor y frustración con Estrada, clama por un respiro de la constante presión y el sufrimiento que Ángel ha traído a su vida y a la de su hija Sofía Cristo, quien se ha visto involucrada sin querer en la controversia. Bárbara anhela una existencia pacífica, lejos del tumulto que su hijo y su relación han generado.
A pesar de las apariencias y de una relación que parece ser perfecta entre Bárbara y su nuera, la realidad es otra, y la madre de Ángel no duda en señalar a Ana Herminia como la artífice detrás de las decisiones y el ritmo de la relación. Bárbara, con una mezcla de indignación y tristeza, lamenta la influencia que cree que Ana ejerce sobre su hijo, temiendo las consecuencias que esto pueda tener para él. “Esta mujer es la más falsa del universo y lo siento por mi hijo que lo va a pagar muy caro. Nunca he sentido tanta vergüenza como el día de la boda en televisión”, sentencia la actriz.
El ultimátum de la vedette.
La actriz también aborda los rumores de distanciamiento y bloqueos en las redes sociales, negando categóricamente haber excluido a alguien de su círculo digital. Por el contrario, insiste en que ha sido ella la bloqueada, y pide que se revele la verdad de la situación. “Yo no he bloqueado a nadie, están mintiendo, a mí si me han bloqueado ellos, por lo tanto, que cuenten la verdad”, insiste la actriz.
Estrada concluye con una revelación impactante: Bárbara siente que su hijo se ha convertido en un extraño, alguien irreconocible, lo que añade otra capa de complejidad a este drama familiar que se desarrolla ante los ojos del público español. Por último, tanto la vedette como su hija Sofía han confirmado que tienen la intención de demandar a cualquiera que se atreva a criticarlas en televisión. “Sí, vamos a demandar a todo el mundo y no vamos a hablar más. A todo el mundo, he dicho, no doy nombres”.