Alessandro Lequio, roto de emoción.
La Navidad es una época de recuerdos, de emociones y de polémicas. Así lo han demostrado dos de los protagonistas de la crónica social española: Alessandro Lecquio y Ana Obregón. Ambos han vivido un año muy duro tras la pérdida de su hijo Aless, que falleció en mayo de 2020 a causa de un cáncer. Sin embargo, sus formas de afrontar el duelo y de celebrar las fiestas han sido muy distintas, y han generado un gran revuelo mediático.

El conde italiano, que trabaja como colaborador en varios programas de televisión, ha optado por mantener un perfil bajo y discreto, sin entrar en polémicas ni dar exclusivas. Su único gesto público ha sido compartir un vídeo en sus redes sociales, en el que se ve a su hijo Aless, cuando era pequeño, junto a Santa Claus, dedicando unas palabras a su hermana Ginevra.
“Feliz Navidad a todos”.
“Hola Ena, estoy aquí con Santa Claus y acaba de decirme que vas a tener un montón de regalos porque has sido una niña muy buena, ¿verdad?”, dice el niño con una sonrisa. Lecquio ha acompañado el vídeo con un breve mensaje: “Feliz Navidad a todos”.
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La actriz y presentadora Ana Obregón, por su parte, ha seguido una estrategia muy diferente. La también bióloga ha decidido vender su dolor y su alegría a la prensa del corazón, concediendo entrevistas y reportajes exclusivos sobre su vida tras la muerte de su hijo. Uno de los más comentados ha sido el del bautizo de su nieta Ana Sandra.
Obregón organizó el bautizo el pasado 17 de diciembre, y acudió al evento vestida de rosa, con la niña en brazos, y rodeada de familiares y amigos. La actriz posó para las cámaras y declaró su amor por su nieta, a la que considera “un regalo del cielo” y “la luz de su vida”. Sin embargo, no todo fue felicidad en el bautizo.
La polémica ausencia en el bautizo de su nieta.
Uno de los grandes ausentes fue Alessandro Lecquio, que declinó la invitación de Obregón y se desentendió del asunto. El italiano ha dejado claro que no tiene ninguna relación con la niña, ni con su madre, y que no le interesa participar en el circo mediático que ha montado su ex. Lecquio ha explicado que la niña es hija legal de Ana Obregón, y que por eso lleva sus apellidos, pero que él no tiene nada que ver.
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“La niña es hija legal de Ana y por eso lleva sus apellidos, el resto es darle vueltas absurdas”, ha dicho en el programa ‘Vamos a ver’. “Si mañana tú y yo tenemos hijos nuevos, yo no le puedo poner el apellido Prat ni tú Lequio, pero se lo podemos poner como nombre, no como apellido”, ha añadido, dirigiéndose a Joaquín Prat, el presentador. Además, ha restado importancia al hecho de que en la tarta del bautizo apareciera el nombre de ‘Antia Lequio Obregón’, y ha dicho que eso es una decisión de la madre, que puede poner el nombre que quiera.

Así, Lecquio y Obregón han mostrado dos formas opuestas de vivir la Navidad tras la muerte de su hijo. Dos formas que reflejan sus personalidades, sus intereses y sus sentimientos. Dos formas que han provocado el aplauso y la crítica de la opinión pública. Y dos formas que, seguramente, no cambiarán en el futuro.