La presentadora Lara Álvarez puso fin a su aventura en la isla de Supervivientes, la segunda consecutiva, siendo recibida en el aeropuerto por toda su familia.
Los padres y el hermano de Lara no quisieron perderse este bonito reencuentro después de tres meses sin verse, y tampoco faltó a la cita su perro Choco, que también le ha echado mucho de menos.
Por cierto, de su supuesto nuevo novio… ni rastro.
Después de tanto tiempo lejos de casa, la joven por fin pudo abrazar a su familia y al bueno de Choco, que miraba a los fotógrafos sin saber muy qué estaba pasando.
Ahora tocan vacaciones y descansar junto a sus seres queridos de estos tres duros meses en Honduras, y también preparar los nuevos proyectos para septiembre, que a buen seguro que no le faltarán a la guapa presentadora.
Una foto publicada por Lara Álvarez (@laruka) el
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