Un regreso lleno de emoción: Anabel Pantoja ya está en casa con su hija.
La alegría ha vuelto a instalarse en el hogar de Anabel Pantoja. Tras días de incertidumbre y preocupación, la sobrina de Isabel Pantoja ya ha regresado a casa con su hija Alma, y la noticia ha sido recibida con un torrente de emoción por parte de su familia, amigos y seguidores.
Una de las primeras en expresar su felicidad ha sido Belén Esteban, quien, con la voz entrecortada por la emoción, ha compartido cómo está viviendo este momento tan especial: »He hablado con ella y he visto a mi niña. Estamos muy felices y agradezco mucho las palabras que han tenido», ha declarado la de Paracuellos, dejando claro que ha estado al lado de Anabel en todo momento.
Una recuperación que exige paciencia y dedicación.
Aunque el alta hospitalaria es un gran paso, el camino aún no ha terminado. La pequeña Alma seguirá necesitando revisiones y cuidados médicos, algo que Anabel ha asumido con absoluta entrega. De momento, no tiene intención de volver al trabajo, ya que su prioridad es el bienestar de su hija.
»La niña tiene que tener un seguimiento, pero no voy a decir nada», ha afirmado Belén, respetando la privacidad de su amiga. Por su parte, Kiko Hernández, quien ha vivido una experiencia similar, ha querido destacar lo que supone este proceso: »Cuando pasas un proceso así largo de hospital con un niño, tiene que haber un montón de revisiones. Esto no se acaba aquí, esto no es ‘ole, ya estamos en casa y ya está’. Tienes que llevarla cada cierto tiempo para ver cómo va, tienes que ver cómo empiezan a gatear, cómo empiezan a hablar…».
El papel fundamental de la familia y los abuelos.
Las lágrimas no han tardado en aparecer cuando Belén ha recordado lo duros que han sido estos 18 días de ingreso hospitalario. La familia y los amigos se han volcado completamente en apoyar a Anabel y a su pareja, David. Sin embargo, si alguien ha estado al pie del cañón sin descanso, han sido los abuelos.
»Los abuelos, principalmente, y los amigos, su familia, porque nos consideramos como tal, estamos muy felices porque no han sido días fáciles. Quiero recalcar que los abuelos han sido muy importantes. Merchi ha estado, llevaba comida y ropa limpia. Se tiraba todo el santo día. Por eso digo muchas veces que benditos abuelos, porque los padres sufrimos, pero sobre todo los abuelos sufren mucho por su nieta y por su hija», ha relatado con la voz quebrada.
Además, ha querido recordar también a la otra abuela de Alma, asegurando que su papel ha sido igual de esencial: »No quiero nombrar solo a Merchi, a la otra abuela, por supuesto, quiero decir desde aquí que yo me acuerdo de muchas cosas y gracias a los abuelos y las abuelas que nos quitan muchas cosas para que los padres no suframos y se llevan doble sufrimiento».
Un apoyo inesperado que ha conmovido a todos.
Lo que nadie imaginaba era la cantidad de personas que han seguido de cerca la evolución de Alma y han mostrado su apoyo a la familia. La oleada de cariño ha sorprendido incluso a Belén, que no ha podido evitar emocionarse al hablar de ello:
»Ha rezado tanta gente por esta niña que la niña es de David y de Anabel, pero creo que Alma es un poquito de toda esa gente que ha estado ayudando de una manera inconsciente o consciente. La gente ha estado poniendo velas por ella, hemos hecho promesas por ella… Yo no sabía que la gente quería tanto a Anabel», ha reconocido.
Entre lágrimas, la colaboradora ha recordado a su propia madre, Carmen, y lo importante que fue para ella en los momentos difíciles. Porque, al final, en situaciones como estas, la familia se convierte en el pilar más fuerte y en el refugio donde encontrar consuelo y fortaleza.