Sucedió en directo en Telecinco.
Laura Matamoros, hija del conocido Kiko Matamoros, ha tejido una relación estrecha y multifacética con la cadena Telecinco, un vínculo que se ha fortalecido a lo largo de los años a través de su participación en varios realities y programas de la cadena. Su primer gran salto a la fama fue como ganadora de ‘GH VIP 4’, donde demostró ser una competidora feroz y carismática. Desde entonces, Laura se ha convertido en una figura recurrente en el universo de Telecinco, participando en programas como ‘Supervivientes’, donde su espíritu combativo y su personalidad franca la han convertido en una favorita del público.
Además de su presencia en realities, Laura ha ampliado su colaboración con Telecinco al incursionar en el mundo del entretenimiento matutino. Recientemente, se unió al equipo del programa ‘Vamos a ver’, presentado por Joaquín Prat, donde aporta su visión sobre las últimas tendencias en moda, maquillaje, ejercicio físico y alimentación. Esta faceta como colaboradora le ha permitido mostrar una versión más íntima y personal, compartiendo sus recomendaciones y consejos con la audiencia, y consolidando aún más su relación con la cadena.
Un salto en helicóptero para la historia.
Laura Matamoros, la intrépida concursante de ‘Supervivientes’, ha desafiado la gravedad en tres ocasiones, lanzándose desde el icónico helicóptero. El pasado domingo, en un emocionante episodio, sumó su tercer salto, esta vez tras ser repescada por el público. Su valentía la puso frente a otros competidores, como Kike Calleja, Lorena Morlote y Rocío Madrid.
La adrenalina fluía mientras Matamoros se preparaba para el desafío. Pero esta vez, tenía una petición especial: aumentar la altura del helicóptero. “¡Es el salto más alto de la edición!”, exclamó Laura Madrueño, la presentadora, momentos antes de que Laura se lanzara al vacío. Sandra Barneda, con su característica precisión, especificó que la altura alcanzaba los 12 metros.
El momento del salto fue épico. Laura, con los nervios a flor de piel, dedicó unas emotivas palabras: “¡A la madre que me parió, a mi padre y a todas mis hermanas!”. Esta dedicatoria venía después de que su anterior salto fuera un grito de desafío a la exmujer de su padre: “¡Makoke a la calle!”.
La caída fue perfecta, recta y sin titubeos. Laura emergió del agua y nadó hasta la orilla, donde Laura Madrueño le tenía preparada una sorpresa. “Vas a entrar por primera vez a la palapa”, le anunció. La joven no pudo contener la emoción al adentrarse en la palapa de la edición, un lugar que no había pisado desde hacía siete años, cuando participó por primera vez en el concurso en la edición de 2017. El círculo se cerraba, y Laura Matamoros estaba lista para enfrentar nuevos desafíos en la isla de la supervivencia.