Trágico suceso.
Algunas tragedias son particularmente impactantes. Los fallecimientos por causas naturales, como la avanzada edad del finado, son más fáciles de racionalizar. Sin embargo, hay casos en los que el drama se acentúa por factores como la muerte de una persona tan querida como Cristo Báñez.

La moda española está de luto por la pérdida de uno de sus grandes talentos: Cristo Báñez. El diseñador andaluz ha sido hallado muerto en su domicilio de Sevilla a los 41 años de edad, según ha informado el diario Huelva Hoy, que cita fuentes cercanas al modisto. La noticia ha causado una gran conmoción en el mundo de la moda y el espectáculo, donde Báñez era muy querido y admirado por su trayectoria profesional y su carisma personal. Entre sus amigos más íntimos se encontraban famosas como Eva González, a quien vistió en varias ocasiones.
🔴 #ÚLTIMAHORA | El diseñador de moda almonteño Cristo Báñez ha fallecido#Almonte https://t.co/dO5alQgzX8
— HuelvaHoy (@huelvaHOYcom) May 10, 2023
Cristo Báñez, cuyo nombre real era Miguel Ángel, nació en Almonte (Huelva) el 26 de febrero de 1982. Desde niño mostró una pasión innata por la moda, que le venía de familia. Su madre, Critobalina Báñez, era una modista de renombre en la comarca y le enseñó los secretos del oficio en el taller familiar. Allí, el pequeño Cristo se familiarizó con las telas, los patrones y las combinaciones de colores, y empezó a dar sus primeros consejos a su madre sobre cómo mejorar los diseños. Nadie se extrañó cuando, al terminar el bachillerato, decidió estudiar Diseño, carrera que acabó con mención de honor en Estilismo y Patronaje Industrial. Sus referentes eran Valentino y Tom Ford, dos maestros de la elegancia y la transgresión.
Los inicios de Cristo Báñez en el mundo de la moda no fueron fáciles. Tuvo que hacerse cargo de todo: desde limpiar el taller hasta gestionar los pedidos, pasando por crear los patrones y coser las prenda. Noches sin dormir, mucho trabajo y poca recompensa. Pero él nunca se rindió. Contaba con el apoyo incondicional de su familia y con una gran ilusión por cumplir su sueño. Poco a poco, se fue abriendo camino y ganando prestigio.
Abrió fábricas en Portugal y Marruecos, un taller en Almonte y una tienda de cuatro plantas en Sevilla. Amplió su oferta a la moda masculina, la costura a medida, las novias y los trajes de flamenca. Se convirtió en uno de los diseñadores más importantes de Andalucía y en el favorito de la Casa de Alba, para la que vistió a la duquesa Cayetana, a su hija Eugenia, a Genoveva Casanova y a su nieta Mina.
Su éxito se basaba en tres pilares: profesionalidad, buen hacer y estar en el lugar y el momento adecuados. Pero sobre todo, en su amor por la moda, que era su razón de vivir. Ese amor le llevó también a la televisión, donde participó como jurado en el programa ‘Quiero ser’, emitido por Divinity en 20161. Allí compartió plató con las blogueras Dulceida y Madame de Rosa, y ayudó a formar a jóvenes aspirantes a influencers de moda.
Cristo Báñez deja un vacío enorme en el panorama de la moda española y en el corazón de todos los que le conocieron. Su legado perdurará como testimonio de su talento y su pasión.