Ana Rosa se hunde en Telecinco.
La semana pasada parecía que el programa de Ana Rosa Quintana, ‘TardeAR’, había encontrado por fin su hueco en la parrilla de Telecinco. El infoshow logró superar el 10% de share en todas sus emisiones y alcanzó su máximo histórico el jueves, con un 11,2% y el coliderazgo de la franja. Sin embargo, esta semana ha vuelto a demostrar que se trata de un producto que no encaja con los gustos del público vespertino y que su éxito fue solo un espejismo.
‘TardeAR’ ha cosechado unos datos muy pobres el lunes y el martes, con un 9,4% y un 9,7% respectivamente. Unas cifras que contrastan con el resto de programas de la cadena, que han visto aumentar su audiencia gracias al tirón de la polémica entrevista a Ángel Cristo, el hijo de Bárbara Rey, que ha sacudido el mundo del corazón.
El programa de Ana Rosa, sin embargo, no ha sabido aprovechar este filón y ha ofrecido unos contenidos aburridos y repetitivos. Además, con una mesa VIP que no aporta nada y que solo genera rechazo entre los espectadores, como ocurrió ayer con la intervención de Marina Rivers.
La decisión más polémica de Mediaset.
Ana Rosa Quintana, que lleva años siendo la reina de las mañanas, parece haber perdido su chispa y su capacidad de conectar con la audiencia. Su fichaje por las tardes fue una apuesta arriesgada de Telecinco, que decidió cancelar ‘Sálvame’, el programa que durante más de una década había dominado la sobremesa con su fórmula de humor, cotilleo y polémica. La decisión fue muy criticada por los fans del espacio de La Fábrica de la Tele, que no entendían por qué se eliminaba un formato que funcionaba y que tenía una legión de seguidores fieles.
Las comparaciones son inevitables, y los datos no dejan lugar a dudas: ‘Sálvame’ le daba a Telecinco un 13%-13,5% de share por estas mismas fechas en 2022, cuatro puntos más de lo que ha conseguido ‘TardeAR’ esta semana. Un programa que, además, hubiera sabido exprimir al máximo la actualidad del corazón y que hubiera ofrecido un espectáculo mucho más divertido y dinámico que el de Ana Rosa. No es de extrañar, por tanto, que muchos espectadores echen de menos a Jorge Javier Vázquez y su equipo en plena guerra entre Bárbara Rey y su hijo.
La realidad es que ‘TardeAR’ no ha cuajado entre el público y que su audiencia es muy volátil e insuficiente. El programa necesita un cambio radical de contenidos y de estilo si quiere salir del bache y recuperar el liderazgo que tenía ‘Sálvame’. Porque no es el espectador el que se tiene que adaptar al nuevo modelo que propone Telecinco; es Telecinco el que se tiene que adaptar a los gustos del espectador. Y si no, seguirá cosechando estos desastrosos resultados.