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Paga casi 300 euros por comer en el restaurante de Jordi Cruz y opina sin cortarse sobre su menú: “Sabe a incendio”

Jordi Cruz y el fenómeno de la gastronomía en redes.

Jordi Cruz es uno de los chefs más influyentes de España, un rostro familiar gracias a su papel como jurado en MasterChef. Su imagen en televisión ha mostrado su carácter exigente y perfeccionista, pero su trayectoria profesional va mucho más allá. Con tres estrellas Michelin en su haber, su cocina combina la tradición con la innovación, algo que le ha convertido en un referente dentro del sector.

La hostelería se ha convertido en un imán para el contenido digital, especialmente en plataformas como TikTok e Instagram. Las experiencias gastronómicas no solo se disfrutan en el restaurante, sino que también se comparten en redes, donde los usuarios buscan recomendaciones y reseñas. Este fenómeno ha convertido a los chefs en auténticas celebridades y a los restaurantes en escenarios de tendencias virales.

El restaurante ABaC, en Barcelona, es el epicentro de la propuesta culinaria de Jordi Cruz. La Guía Michelin lo describe como un espacio «elegante», rodeado de arte contemporáneo y un jardín apacible. Su menú degustación, que roza los 300 euros, ofrece una experiencia única donde la creatividad y el sabor se fusionan.

La visita de Edurnyx a ABaC.

Edurnyx, una influencer especializada en reseñas de restaurantes, quiso comprobar por sí misma si el prestigioso local de Cruz estaba a la altura de su fama. «Esto es todo lo que se come en un restaurante de tres estrellas Michelin», anunció en su vídeo, que no tardó en captar la atención de sus seguidores.

Durante su visita, documentó cada detalle del menú. Comenzó con un Bloody Mary, del que destacó su sabor: «Está buenísimo». Los entrantes fueron toda una sorpresa, especialmente un pan chino relleno de anguila y salsa teriyaki, que describió como «muy bueno» y con un toque a buñuelo.

El recorrido gastronómico incluyó platos con una fuerte carga conceptual. Uno de los más llamativos fue una piña colada servida de una forma poco convencional: «Lleva una capita que hay que ir arrastrándola con una cuchara mediante movimientos circulares. Se van creando una especie de fideos y es como un ramen. A zumo de piña me sabe».

Sabores inesperados y cocina conceptual.

El pan de la casa también recibió una valoración positiva: «Lleva mantequilla y un poquito de erizo», comentó la influencer. Uno de los platos que más le sorprendió fue un tomate con una capa de miel y relleno de tartar de tomate. «Sabe a pizza», aseguró, destacando la originalidad de la propuesta.

Otros platos icónicos del menú degustación fueron la «secuencia ibérica» y un ramen muy especial, donde los fideos estaban hechos de melón y el caldo, de jamón. También pudo probar «la versión de Jordi Cruz de la carbonara», en la que los macarrones estaban elaborados con calamar y acompañados de trufa y guanciale.

@edurnyx Menú degustación de 295€ por persona (Abac Barcelona) #parati #asmr #fyp #viral #food #comida #foryou #viral_video #asmrfood #barcelona #abac #estrellamichelin ♬ sonido original – edurnyx

Uno de los momentos más comentados de su experiencia fue cuando probó un plato inspirado en incendios. «Es verdad, sabe como a incendio», afirmó con sorpresa. La propuesta incluía una vela de mantequilla ahumada, un elemento que refuerza la apuesta de Cruz por la cocina multisensorial.

Alta cocina y el precio de la experiencia.

El menú degustación de ABaC cuesta 295 euros, una cifra que para muchos puede parecer excesiva, pero que se justifica por la exclusividad de la experiencia. La combinación de ingredientes selectos, técnicas innovadoras y una presentación impecable hacen que este restaurante sea una referencia en la alta gastronomía.

La reseña de Edurnyx pone de manifiesto cómo los restaurantes de élite han encontrado en las redes sociales un escaparate perfecto. Más allá de la crítica gastronómica, estos vídeos generan curiosidad y despiertan el deseo de vivir una experiencia que, aunque cara, promete ser inolvidable. Como bien demuestra Jordi Cruz, la cocina no solo se saborea, también se cuenta.